10.3.06

buenos aires

(Del año del pedo pero viene al caso, creo que del 2003)

Deambular por Buenos Aires es como caminar por los andamios de lo que ya no es. Como si fuese un escenario de una obra a la cual ya no pertenezco. Circo virtual generador de historia; degenerador de histeria. El no-lugar, amorfo y obsceno recuerda una vida que nunca fue; personajes que no existen; anecdotas inyectadas con extasis mental y sensorial.

Se chupa la imagen, se escupe y ahi esta. Fina reproduccion paralela, desnuda dimension dual. La intensidad que nos hizo sentir que eramos algo; significabamos algo intenso.
Ver para redescubrir las estructuras fractales del pensamiento, simil a la ciudad en llamas; imparable bola de fuego rodante sobre la angosta senda indeleble.

Un Punto entre miles de puntos conectados. Y ahi estas. Te reconozco. Se donde buscarte. Todo nace y muere en el seno capital, donde lo unico que tendrias que hacer es resucitar. Es el atomo residual. Concentracion espasmodica de arterias. Amalgama taciturna. Casi sonambula. Buenos Aires sabe descender. Aquel mutismo enajenado de seres sin alma; caminantes con destinos dispares y de los otros, que por ese momento mueren para ser parte de la maquina; engranajes de la gran ciudad-machina que rechina. Morimos para darle vida.

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